Venezuela sufre tal vez la peor
crisis económica, social y política de los últimos 200 años, muchos
intelectuales se atreven decir que de la historia, la única verdad es que vivir
este país se ha convertido en una carrera extrema de supervivencia. Solo hace
falta hablar con los vecinos para darnos cuenta lo grave que estamos, donde
vayas, con quien hables, a la hora que sea, el tópico más popular de
conversación es la mala gestión presidencial y lo
difícil que es cada día mantener a la familia.
Cada día son más las madres que
dejan de comer para poder alimentar a sus hijos, cada vez son más los pacientes
que fallecen por falta de medicamentos, cada vez son más los venezolanos que
son sometidos por el hampa, esta crisis no perdona a los ciudadanos. Los únicos
que parecen felices de la situación actual del país son las focas oficialistas,
quizás el gobierno alimenta, cuida y protege a sus familias, acabaron con la
felicidad, cordialidad y amabilidad que nos caracterizaba, hoy solo somos el país más
violento del mundo, con un porcentaje de 85% de escasez de alimentos y
medicamentos, el que tenga ojos que vea.
Mientras seguimos de mal en peor,
Tibisay Lucena, en un discurso bastante nerviosa, utilizando un lenguaje poco
fluido, dio a conocer todas las razones, para el gobierno nacional, por las que
no se podría realizar el referendo revocatorio este año, aumentando el
descontento y la angustia en nuestra gente. Mientras que por otro lado, el
presidente utiliza su brazo populista, aumentando a partir del 1ro de
septiembre el salario mínimo, que traerá consigo mucho más, mucho más escasez,
pobreza, inseguridad, acarreará mayor crisis.
Toda esta situación nos mantiene
con gríngolas en las colas de supermercados, farmacias y hospitales, somos
rehenes en nuestros hogares por el toque de queda impuesto por la inseguridad,
nos ahoga en la desesperación y desesperanza. Es momento para que salgamos de
ese terrible mar de incertidumbre y miedo en el que nos encontramos, para este
1ro de septiembre la MUD convoca la gran marcha a Caracas, es momento para que
los ciudadanos impongan cuales son las condiciones de este juego por el cambio,
salgamos todos, sin miedo. Con una marcha no cambiamos el país, es verdad, pero
si comenzamos a caminar por el camino correcto, el gobierno nos puede pisar por
separados, pero juntos somos más fuerte que esa bota. No perdamos el camino,
conquistemos el cambio urgente en Venezuela, recuperemos nuestra felicidad.
Autor: Edward
Porras Dos Santos
Twitter e
Instagram: @EdwardPorrasDS