Valencia 26 de enero de 2017.- El coordinador político del partido Vente Venezuela en Carabobo, Tomas Silva Guzmán, aseguró que el secuestro del diputado por el estado Miranda, Gilber Caro, quién se encuentra sin derecho a la defensa, es el inicio de una ola de represión por parte del régimen que perdió el respaldo del pueblo y está debilitado.
"El fracaso de las políticas de Maduro lo ha llevado a perder el apoyo popular y al estar debilitado, a este régimen no le queda otra opción que apelar a la represión y a la persecución de quienes pensamos distintos, para pretender amedrentarnos, pero no lo van a lograr", precisó Silva Guzmán.
El dirigente regional de Vente Venezuela, aseguró que en el caso del diputado Gilber Caro se han violentado todos sus derechos humanos, establecido en la legislación venezolana y en los pactos y tratados internacionales suscritos por el Estado venezolano en esta materia.
"El régimen en su desespero además de vulnerar la inmunidad parlamentaria de Gilber Caro, viola principios fundamentales en Venezuela y en el mundo que es el derecho a la defensa y el derecho que tiene detenido de comunicarse con sus abogados y que sus representantes legales y familiares, conozcan su estado físico y sus condiciones de reclusión", enfatizó.
Silva Guzmán, resaltó que está ola de persecución y represión "en contra de quienes queremos un cambio de Gobierno", está dirigido por el vicepresidente de la República, Tareck El Aissami, a quien definió como uno de los más radicales dirigentes del chavismo.
"Tareck El Aissami es quién dirige está ola de represión, es uno de los más radicales del régimen de Maduro y es experto montando ollas y sembrando evidencias, como lo hizo en el caso del diputado Gilber Caro, es por eso que lo pusieron a la cabeza del fulano Comando Antigolpe, que no es más que una figura para perseguir y encarcelar a quienes legítimamente se opongan a éste fracasado Gobierno", resaltó.
El Coordinador Político del partido Vente Venezuela en el estado Carabobo, destacó que ante estas pretensiones del Gobierno "tiene que estar cada día más firme la presión ciudadana en la calle. De manera pacífica y armados de ese coraje para lograr un país próspero y apegados a las leyes y la Constitución".
