El reconocimiento le fue otorgado por haber sido elevado como miembro correspondiente de la Academia Venezolana de la Lengua
Fotógrafo: Orlando Nader
El escritor e historiador carabobeño Luis Cubillán Fonseca recibió la Orden Universidad de Carabobo, en su única clase, durante un acto realizado en el salón de sesiones del Consejo Universitario, como reconocimiento por haber sido elevado como miembro correspondiente de la Academia Venezolana de la Lengua.
En el presídium se hicieron presentes la rectora de la máxima casa de estudios de la región, Jessy Divo de Romero; el vicerrector académico, Ulises Rojas y el vicerrector administrativo, José Ángel Ferreira; quienes estuvieron acompañados por el presidente de la Academia Venezolana de la Lengua, Horacio Bior Castillo; el presidente del Ateneo de Valencia y ex rector de la UC, Elis Mercado Matute y el presidente de la Academia de la Historia del estado Carabobo, Carlos Cruz.
El acto, que se inició con la interpretación de las notas del Himno Nacional de la República de Venezuela, interpretado por el Coro Protocolar, fue organizado por el alma máter carabobeña, el ateneo y dicha academia regional, contó con la presentación de destacadas personalidades de la sociedad civil de la región.
El primero en hacer uso de la palabra fue el doctor Carlos Cruz, quien destacó que para ellos era un gran orgullo y un acto de gran satisfacción este reconocimiento que se hace a Cubillán Fonseca.
“Se merece esto y mucho más y estamos muy contentos de compartir con ustedes porque es una persona excelente. Realmente creo que quedo corto al hablar de este personaje. La universidad se viste de alegría por esta actividad, que la pudiéramos llamar un acto de resistencia”, manifestó.
Mercado Matute, aseguró en su intervención que la UC tiene mucho que agradecerle a este reconocido historiador, porque fue uno de los fundadores de la Oficina del Cronista de la casa de estudios, dependencia que muchas casas de estudio superiores del país no tienen.
Destacó que decir Luis Cubillán Fonseca, “es decir honestidad, es decir cultura es un hombre universidad, su nombre es inseparable de esta casa de estudios, un constructor de sueños y la universidad honra honrando. Luis se merece esto y más por ser un hombre íntegro”.
Seguidamente se procedió a la lectura del acuerdo y el acta de conferimiento de los reconocimientos, por parte de las instituciones organizadoras del acto, procediendo finalmente a la entrega de los mismos. Cabe destacar, que la Academia de la Historia del estado Carabobo le otorgó el Premio Venezolano de Conservación del Patrimonio Histórico y Cultural. Luego de la imposición de la Orden Universidad de Carabobo, el Coro Protocolar entonó el himno de la casa de estudios.
Divo de Romero en su intervención señaló que, “aquí están reunidas tres instituciones de luces, paz y democracia y esto nos reúne aquí donde se convocan Dios, liberad y cultura”.
No significa que por mi amistad se le hace este reconocimiento, pero es que en el Consejo Universitario habíamos decidido que se hace muy fácil reconocer a los de afuera, a lo foráneo, pero cuando se trata de nuestros compañeros se nos hace bastante difícil.
Señaló que el país vive momentos de muchas dificultades, donde a su juicio se quiere acabar con las universidades, quitándoles todo lo necesario para su normal funcionamiento. “Por un lado nos atacan y por otro lado salimos a defendernos”.
“Creo que definitivamente nosotros, todos, decidimos aportar a Venezuela y reconocer a aquellos que defienden al país y reconocer a aquellos que ofrecen al país y todo su acervo cultural, como lo ha venido haciendo Luis Cubillán Fonseca”, manifestó.
Nació historiador
El homenajeado intervino para agradecer los reconocimientos que le habían hecho durante este emotivo acto, en el cual se dieron cita, además de las autoridades universitarias y fuerzas vivas de la ciudad, sus amigos y familiares.
Explicó que él prácticamente nació historiador, porque desde muy chico le gustó esta asignatura y fue estimulado por su padre. Relató que uno de sus trabajos fue tratar de conocer los orígenes de la fundación de la ciudad de Valencia y para ello no se dirigió a los libros sino a encomiendas.
Se refirió a la tiranía de Marcos Pérez Jiménez, que no quería que la universidad abriera sus puertas porque una universidad es contraria a la tiranía por su misma esencia. Enfatizó que en la actualidad se está viviendo algo parecido, donde la patria vive horas menguadas, porque la muerte la acecha.
Finalmente, hizo referencia entre otras cosas, a su trabajo durante varios años en la UC, cuando fue creada la Oficina del Cronista, donde fue designado el doctor Guillermo Mujica Sevilla, quien también era cronista de la ciudad.
