Según la OMS, la salud es el
estado de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de
afecciones o enfermedades. Muchos acontecimientos suceden a cada momento en el
país, desde la cola para comprar productos de primera necesidad hasta el
asesinato del vecino de tu cuadra para quitarle el celular, en esa dinámica hemos
caído los venezolanos. Cada vez se hace más gris el panorama, el preguntarnos qué
hacer para salir de esto se vuelve más común. Mientras esto le ocurre al
pueblo, una pequeña cúpula se sigue quedando con el dinero del control de
cambio, se sigue quedando con los recursos de las obras inconclusas y con la
esperanza de 30 millones de venezolanos.
Como futuro médico, me preocupa
mucho un tema que he tocado reiteradamente, que es el tema de Salud en
Venezuela, y más específico la falta de recursos destinados a la salud del
venezolano. ¿Alguna vez te has preguntado cómo es estar ingresado en un
hospital? Imagina que sufriste un infarto, te llevan al hospital y debes
quedarte ingresado, allí surge el primer problema: no hay camas, debes esperar
en un banquito hasta que haya una camilla o cama disponible, luego debes
comprar un jelco para poder hidratarte y colocarte tratamiento intravenoso,
seguidamente debes comprar los tubos para las muestras de sangre y pagar los
exámenes de laboratorio ya que el centro no cuenta con los reactivos, después
de varios días dependiendo de la evolución clínica eres trasladado a un servicio
con “más comodidad”, pero todos esos días gastaste comprando los medicamentos
que el hospital no tiene, ¿y si necesita una tomografía? Debe pagar una
ambulancia para el traslado a un centro privado más el costo de la tomografía.
Los antibióticos también saldrán de tu bolsillo. Después de varios días estas
de alta médica y gastaste lo mismo que en una clínica privada. Si el sistema de
salud pública en Venezuela es gratuito ¿Por qué el Estado no se encarga de
cumplir?
Además no hay vacunas, por lo que
reaparecen enfermedades que en otros países ya no existen. Una simple
enfermedad como la Fiebre Chikungunya que es de fácil control epidemiológico se
convierte en una epidemia. Cada vez son más los números de casos de SIDA y
Sífilis congénito, la prevención de enfermedades se fue al subsuelo, los
preservativos desaparecieron del mercado al igual que las pastillas
anticonceptivas y en una guardia en la Maternidad del Sur vemos que el promedio
de edad de las embarazadas en sala de parto es de 15 años. No hay insumos para
atender correctamente los partos y recién nacidos pero supuestamente
construirán el “Hospital Pediátrico del Sur”. Y mientras los hospitales se
caen, “recogieron” 10 millones de firmas para derogar un decreto que afecta una
cúpula con cuentas fraudulentas en los bancos de Andorra.
Hoy día vemos cómo el gobierno le
lanza migajas de salud al pueblo y hacen propagandas falsas de supuestas
mejoras del sistema de salud; regulan la venta de medicamentos y el Ministro de
Salud dice que debemos consumir menos medicamentos. ¿Y cómo hago si tengo una
infección? ¿Y si tengo una fractura, me desmayo del dolor? Pareciera que ser
saludable se ha vuelto un privilegio que debemos mendigarle al gobierno, quienes
le están dando la espalda a nuestra carta magna. ¿Qué hacer entonces? Han sido
16 años terribles para la historia de Venezuela con los actos de corrupción más
impresionantes, los cuales jamás se vieron en la tan mencionada 4ta república,
antes podías ir a una farmacia y conseguir todo el tratamiento para la
enfermedad, ahora crearon otro sistema de regulación llamado SIAMED donde el
gobierno te dirá cuándo vas a comprar tus medicamentos. No nos quedemos callados, hay muchas cosas por hacer, esta es una
lucha de todos que comienza por ti hermano. Mientras estás leyendo este
artículo, están muriendo pacientes en el hospital por falta de recursos, no nos
quedemos de brazos cruzados: organízate y participa desde tu comunidad, trabajo
o universidad, se parte del cambio. No permitamos que nos quiten a Venezuela,
rescatemos el país comenzando por la Asamblea Nacional, participa.
Edward A. Porras
Dos Santos
Twitter e
Instagram: @edward_porrasds
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